Archive for 28 dic 2009

ASFIXIARSE NO ES NADA FÁCIL


.

Pude llegar hasta este punto. Pude.

Esta tarde salí a dar la vuelta. El plan original consistía en: pasar a ver a una amiga (Yaris) a su trabajo, sugerirle comer unos bagguettes a la hora de su descanso y luego seguir adelante sin más planes.
Todo salió excelente hasta el momento de la comida, ése bagguette con selva negra, vegetales, queso y aderezo estaba a punto de finalizar dentro de mí.

Mientras yo engullía el último bocado, mi amiga sonrió al saber a consciencia que nuestros pies llevaban jugando y chocando casi todo el rato; así que con su adidas mató a mi puma, aventándome el pie, me hizo gesto de malicia y gracia... como niña, pues. Yaris rió abriendo mucho la boca, y tras un extraño suspiro, un moco asomó por su orificio nasal derecho. Yo reí aún más que ella al ver su rostro enrojecido y saber de antemano que algo se le había salido por allí... por cosas del destino o el karma o un simple descuido mío (bastante estúpido, he de decir), me ahogué con mi bocado de baguette, algún desgraciado ingrediente se fue por donde no debía y comencé a enrojecer y a toser, mientras mis ojos se llenaban de lágrimas. ¿Se me olvidó mencionar que bebíamos vino para bajarnos la comida? Pues sí... bebíamos y ya estábamos algo ebrias.

Yaris no sabía identificar si yo jugaba o solo exageraba, hasta que levanté el salero (no sé por qué) como haciéndole seña de que moriría si no me ayudaba ya mismo, me levanté y se levantó conmigo. Ella gritó ayuda aún con su moco colgando y yo... quise reir tanto, así como quería llorar y tomar una buena bocanada de aire. Yaris me ofreció vino e intenté beberlo (casi todo escurría por las comisuras), un mesero se acercó y me ayudó al levantar mis manos mientras masajeaba mi traquea (nada sexy). Respiré, me limpié las lágrimas y me reí con una mezcla de ebriedad, verguenza y gracia por el momento absurdo que parecía que me llevaba a un fin. Ha de ser horrible morir ahogado... desespera muchísimo.

Tras pagar la cuenta, salimos aún riendo, ella sin su moco y yo con la cabeza en alto, como queriendo decir: Sí señores y señoras, me ahogué ¿ y qué?

Escribo esto porque lo pensé, porque lo sentí con fuerza:

¿Qué pasaría si todo llegase a su fin?, ¿Que pasaría con todo lo que aún tengo pendiente?, lo que aún no me explico y lo que anhelo con tanta fuerza, o sea... quiero ver más de cerca por donde voy, sé que me encamino a tantas cosas, pero quiero verlo de cerca, disfrutarlo un buen rato... Inclusive creí en alguna sensación aún después de fallecer... ¿será eso posible? Morir y estar del otro lado sintiéndose incompleto, que quede algún hilo de consciencia, de lo que fué y no terminó.

No sé si me leo muy ilógica o quizás egoista... Sé que todo llega a su fin, pero estos días creo en una fragilidad inmensa, nosotros como seres humanos de por sí lo somos, las circunstancias lo son aún más, tienen menos control que nosotros.
No quisiera dejar nada pendiente, por eso es que disfruto acercarme a ser "expléndida" en lo que hago, obvio... no lo soy en todo, quizás en más en lo que me conviene; está más que claro que no soy ningún ejemplo del "debiese ser". (buajaja)

Yo solo... Ojalá no me vuelva a ahogar o peligre mi vida de un modo absurdo. Y si lo hago... que no falte quien me masajee la traquea o al menos, saber que a ELLA le hice el amor más de un millón de veces ... Así no me importaría dejar de existir.